A los padres objetores

Después de una lucha heroica, contra viento y marea, en defensa de la libertad de enseñanza, 52.000 familias habían objetado a la prototalitaria y estulta (las dos cosas al tiempo) Educación para la Ciudadanía, de la que se han lucrado ya unas cuantas fundaciones de socialistas y unos cuantos diputados del PSOE. Porque siempre con el dinero de otros hacen fiesta los devotos...socialistas, mientras nos llevan a la igualdad en la miseria y a la paridad, en el paro.
Era previsible que el Tribunal Supremo echara abajo tanto esfuerzo. Previsible porque el Supremo, como el Constitucional, no son otra cosa que prolongación de unas cámaras de representatividad limitada (con listas cerradas y bloqueadas), pura casta parasitaria.
Es un escándalo añadido que, como ha informado y demostrado lanacion.es, el Ministerio de Educación (cuya titular tiene una Sicav con la que sólo paga el 1% de impuestos) sabía la decisión dos días antes de que se haya sabido por el común de los españoles.
Se trata de una asignatura inútil y adoctrinadora, rollera y peligrosa para la salud mental, de una ley injusta y de una sentencia injusta.
La cuestión de fondo es que dar batallas sectoriales hace tiempo que dejó de tener sentido. Es preciso plantear una regeneración de fondo, con objetivos claros y directos, que pasan por la división de poderes y por el cheque escolar. Esas dos cuestiones son centrales en el discurso de la Plataforma de las Clases Medias y serán dos de los objetivos nítidos que se plantearán en la concentración del 14 de febrero, a las 12 horas, en la Plaza de Colón.
No podemos seguir jugando con cartas marcadas, con terrenos de juego trucados, en el que estamos en un partido de tenis con nuestro campo muy ancho y muy largo, y el de los expoliadores y liberticidas muy estrecho y muy pequeño. Antes que nada, los campos han de ser iguales y deben dejar de vivir de nuestros impuestos. Ha pasado el tiempo de los debates estériles, y ha llegado el de los combates efectivos por una democracia basada en los derechos de la persona.
Invito a todo el movimiento pro objeción de conciencia a unirse a la concentración del 14 de febrero.